De trenes, metros e itinerarios textuales

4/11/2011

Esta es la imagen que dibuja la Rayuel-O-Matic tras la lectura de la novela Rayuela de Julio Cortázar. El trayecto de lectura parece un gran viaje de hilos y caminos cruzándose. En relación con la explicación dada en De otra máquina célibe, y lo que se narra en El guardagujas de Juan José Arreola y El manuscrito hallado en un bolsillo de Julio Cortázar, ¿en qué sentido podemos decir que el dibujo de arriba y estos relatos son hipertextuales y reflejan un mundo de recorridos lectores cercanos a la ciudad digital?

Detti

4/20/2011 07:24:44 pm

Pues, porque hay varias posibilidades de lectura, al contrario de la lectura de un relato "normal" en el sentido de relato tradicional, donde hay un hilo narrativo y el lector debe seguirlo según pensó el autor. Además, en general los relatos hipertextuales requieren la presencia de un lector activo quien participa en la construcción de la historia, tiene que descubrir los elementos que le sirven, para así decirlo, resolver el enigma del cuento. Por otro lado, a este tipo de relatos, les falta la descripción detallada de las personas, los lugares, o la historia misma. Son como si nos encontraramos de repente en una historia sin saber de los comienzos, las personas que participan, sin saber adónde va la narración y que es su finalidad (no el final que tampoco conocemos en caso de los relatos no hipertextuales) sino qué es lo que buscamos, a qué se refiere la búsqueda de la resolución.

Bea

4/30/2011 11:14:23 pm

Creo que este dibujo demustra perfectamente la complejidad del texto de Cortázar y del mismo mundo virtual. Las partes del cuento se unen entre sí, a manera de las diferentes páginas de web. El número de las combinaciones posibles es infinito, cada lector puede encontrar su camino apropiado para dar un sentido al texto que lee. En internet ocurre lo mismo, navegamos entre páginas que de algún modo se conectan con un tema.

Zsuzsa

5/1/2011 04:19:24 pm

Sí, las chicas tienen razón, ya no puedo an~adir mucho más. En estos cuentos nos afrontamos a diferentes caminos y posibilidades para elegir, igual que en el mundo virtual. Por ejemplo en El guardagujas los personajes mismos nos explian este fenómeno, porque el viajero insiste en seguir su camino previamente trazado, pero el guardagujas aclara que en este mundo cualquier cosa puede interrumpir nuestro camino y puede obligarnos a desviar.

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